Viaje a Azul
El día 13 de junio los alumnos de 5to año Naturales y 5to año Economía con un grupo de docentes viajamos a la ciudad bonaerense de Azul, para visitar sus lugares emblemáticos.
La primera escala fue en el Monasterio Trapense, donde el guía que nos acompañó explicó como en ese magnífico lugar los diecisiete monjes dividen su jornada entre la oración litúrgica, el trabajo y la lectio divina. Luego, compartimos un hermoso almuerzo a orillas del Arroyo Azul.
Nuestra salida continuó en el Cementerio donde el Arquitecto Francisco Salamone dejó las huellas del estilo art – decó. Allí contamos con la excelente explicación de un guía especialista en masonería, que nos acompañó en una larga caminata por el cementerio brindándonos sus conocimientos.
Seguimos la jornada descubriendo en la Plaza El Quijote, las maravillosas esculturas de Regazzoni, donde parecen tener vida Don Quijote, Sancho Panza y Dulcinea.
Y concluimos nuestra visita en la Casa Ronco. Allí se aprecia la admiración del Dr. Ronco por Miguel de Cervantes Saavedra en su colección de más de trescientos ejemplares de la obra “Don Quijote de la Mancha”.
Su labor hizo que la Ciudad de Azul sea reconocida en el año 2004 como Ciudad Cervantina. En el año 1932 se expuso por primera vez su colección que fue legada por su esposa, junto con la casa y la biblioteca. Azul se ha convertido en la ciudad donde “vive” El Quijote.
Pasada la medianoche volvimos enriquecidos por la visita.
Prof. María Laura Cantagallo
Reseña del viaje a Azul
El día 13 de junio los alumnos de 5to realizamos la salida a la Ciudad Cervantina “Azul”.
Antes de llegar Andrés, nuestro guía, nos explicó la interesante historia de Azul. Había sido un fuerte y recibió su nombre debido a que las sierras que posee toman un color azulino desde lejos.
Al llegar, visitamos primero el Monasterio de los Trapenses, donde los monjes que allí viven siguen la Regla Benedictina: “Un monje será un monje cuando produzca comida con sus manos”. Es por eso que viven su vida terrenal en torno a Dios, y rezan por los que no lo hacen.
Aunque no pudimos oír el canto gregoriano, nuestro guía nos explicó que éste simboliza a Dios, por lo que no tiene principio ni fin.
Más tarde fuimos al Cementerio de Azul, que es prácticamente único. La presencia de simbología mazónica es innegable. Allí, un especialista del tema llamada Nahuel, nos explicó recorriendo tumba por tumba, la simbología mazónica de los mazones duales (no admitían serlo). Luego nos explicó la simbología de los que sí lo admitían, cuyos principales símbolos eran el compás, la escuadra y el transportador.
Desde allí fuimos a ver la escultura del Quijote hecha de chatarra, y la pared donde está el mural de Quijote junto con gauchos y molinos.
Por último fuimos a la Casa Ronco donde hay una colección de 3500 libros de El Quijote y Martín Fierro. La biblioteca cuenta con 350 ediciones, es decir, 1200 volúmenes de la colección cervantina.
Allí además hay libros únicos, como miniaturas de unos pocos centímetros en distintos idiomas, como el japonés o el alemán. También hay obras de arte de personalidades como Dalí, Walt Disney, entre otros.
Solange Mathot – 5to Naturales